Como pintar un mural en una pared para que embellezca un espacio

Pintar un mural es toda una aventura que nos proporcionará grandes satisfacciones al ver los enormes cambios que experimentará el espacio que se ha elegido para cambiar su aspecto. Las paredes son piezas esenciales en en los espacios tanto cerrados: habitaciones, halls, restaurantes o espacios públicos de todo tipo, como abiertos: en terrazas y instalaciones públicas o privadas.

La pared como elemento artístico.

La pared o el muro es un paramento vertical que puede ser tratada y decorada mediante muy diversas técnicas y estilos. Es una superficie que tiene una extensión amplia para poder llevar a cabo una idea o un diseño. Será preciso enfocarla de una manera conveniente a su entorno, luminosidad, condiciones y medidas, para poder realizar el trabajo que sea idóneo para el cliente que nos encargue el proyecto. Pintar un mural es una de estas opciones y es en la que hoy nos vamos a centrar. El trampantojo es una técnica muy utilizada desde hace siglos y es una posibilidad a tener en cuenta. Con o sin ella, perfectamente podemos realizar un mural artístico que sea la joya visual del lugar….

Pintar un mural en una pared: cosas a tener en cuenta.

Para pintar un mural primero tendremos que saber cuál es el lugar donde va a ir ubicado. Dependiendo de si la pared elegida esta dentro de una casa o edificio, o está en el exterior, deberemos ser consecuentes tanto con la imprimación, como con el tipo de pintura, como con el acabado elegido, para que el trabajo realizado perdure….

Una vez ubicado, procederemos a la medición de la superficie, y a la verificación del estado de la superficie donde vamos a actuar para tenerlo en cuenta a la hora del presupuesto. El diseño va a tener que tener en cuenta donde va a ir, que cambios de luz en las 24 horas del día y la noche va a experimentar, que inclemencias del tiempo u otros tipos, va a soportar. En que tipo de pintura o con que tipo de técnicas va a ser ejecutado. Y cuales son los gustos y preferencias del cliente a la que deberemos adaptar nuestra idea, al plasmarla en un boceto, que presentaremos en el espacio más corto de tiempo posible.

La presentación del boceto del diseño tiene que tener bien claro, que medidas tiene el diseño y como se va a ver sobre la superficie de pared elegida; si es necesario actuar para un arreglo de la superficie a actuar y si necesita una imprimación o no; que colores y tecnicas vamos a utilizar para su ejecución; cual es el presupuesto; la forma de pago y el tiempo de entrega.

Una vez aceptado, procederemos a realizar nuestro trabajo ya bocetando directamente en la pared a escala 1:1 (sino ha habido que refilar o necesitar imprimación, y la pared tiene un fondo claro que nos permita llevar a cabo nuestro diseño con las herramientas y colores, según la técnica o técnicas que hayamos elegido para realizar el mural).

Acabado el proceso artístico con pasión y dedicación, dejaremos secar 48 horas y le daremos una capa de barniz mate, para que la obra perdure con el tiempo, a roces y cambios de iluminación.